domingo, 22 de enero de 2012

El Menú "King" Ahorro de Burger King:

¡Muy buenas! Hoy no escribiré ni de música, ni de historias, ni de discos. Hoy hablaré de comida, y en concreto del menú "King Ahorro" que ofrece la cadena de restaurantes Burger King.

¿Esto es realmente necesario? Quiero decir; siempre he sido tan fan de las hamburguesas del Burger King como del McDonald's pero esto, esto es un insulto hacia la dignidad de las personas.

Tengo que decir, antes de desgajar este "Maravilloso y completo" menú que, los que amamos y nos tiramos a las ofertas como Misae Nohara (Maestra y mentora), nos parece degradante que se juegue así con los dineros de las personas, que cuestan mucho ganarlos, y siendo personas de barrio, más aun.

Para empezar el anuncio televisivo que se emite por todas las cadenas presenta una hamburguesa de carne de vacuno o pollo (a elección del consumidor), acompañado de unas patatas fritas (en envase de cartón) y una bebida a elegir. Y todo esto por el módico precio de 3,30 Euros.

Aún así, la oferta del McDonald's de "Productos por 1 euro" me parece mucho más seductora que la de "King Ahorro", pero dado que en mi barrio no hay McDonald's a 500 Km a la redonda y tenía las piernas como Doña Concha de 'Aquí no hay quien viva' de andar, decidí comer allí.

Tras tragarnos una cola de 20 minutos con la pata caliente, me sirvieron la comida. La presentación de por sí, era para liliputienses debido al minúsculo tamaño de la famosa hamburguesa.

Siempre he sido un gran defensor de las hamburguesas de pollo. El 97% de las veces que voy a restaurantes del tipo "Fast-food" las pido. Me parecen mucho menos sospechosas que las de carne de vacuno aunque también me gusten. Además de que cuando era más pequeño tuve un trauma con una de éstas, que ya contaré en otra ocasión.

Por tanto la decisión fue la hamburguesa de pollo.

Al llegar al asiento (que aprovecho para reclamar más plazas para los comensales ya que tardé otros 20 minutos en encontrar sitio) me dispuse a desenvolver el almuerzo de 3,30 Euros y aquello fue una grata sorpresa.

Se componía de una micro-hamburguesa de un tamaño aún mucho menor sin el papel que la contenía (uno siempre se puede sorprender del grosor que llega a coger el papel). Por dentro, un asqueroso filete de "pollo" con un empanado totalmente alejado de lo que algún día pudo ser el "Long Chicken" compuesto por los putos Corn-Flakes, que ahora les ha dado a todos por empanar las cosas con esto.

Un pollo rancio (Si es que era pollo) con un sabor muy fuerte, como si fuera en vez de pechuga, las patas y el pico. Una rodajaza de tomate caliente, que da mucho asco, 2 tiras de lechuga, también caliente, y mayonesa de 1989.

A esto se le unía una bolsa de papel guarrindongo, salvado de los cubos de basura, con los restos de las patatas de ayer, que por cierto iban 4. Ni envoltorio de cartón, ni pollas.

Lo único que se salva fue la Coca-Cola, que fue el único rico producto de mi hora de comer.

Así que tras dejarme la mitad de la hamburguesa debido al asco que me daba, comer patatas rancias y llenarme el estómago con la deliciosa bebida, tomé la decisión de que no pisaré un Burger King por un largo tiempo.

Aprovecho para alabar la maravillosa oferta de McDonald's de "Productos por 1 Euro" que se ha ganado la crítica positiva de este mes. Si tienes tiempo y ganas de comer, busca tu restaurante más cercano, pero si eres una persona tan extremadamente vaga como yo, lo mejor es pedir una pizza que solo tienes que andar hasta la entrada de tu casa ;)


Saludos culinarios de:
El Niño de las Trencitas.